Comprender qué elementos impulsan la brecha de género de la cultura tóxica. Tercera entrega
La organización de los datos por las cinco dimensiones de la toxicidad ilustra que la experiencia de toxicidad de las mujeres se extiende más allá de la inequidad de género. La siguiente figura traza la brecha de género para los 25 temas que usamos para medir la cultura tóxica, organizados en no inclusivos, irrespetuosos, despiadados, abusivos y poco éticos. (Consulte "La brecha cultural se extiende a todos los elementos de la cultura tóxica".) Por supuesto, estos temas se superponen entre sí, por ejemplo, la falta de inclusión refleja una falta de respeto, razón por la cual los agregamos al medir la toxicidad.
Cuando se trata de la falta de inclusión, las mujeres tienen una evaluación más negativa de si sus empleadores brindan un entorno justo e inclusivo para otros grupos demográficos, incluidas personas de color, miembros de la comunidad LGBTQ y empleados discapacitados o sujetos a discriminación por edad.
La brecha cultural se extiende a todos los elementos de la cultura tóxica
Una cultura tóxica consta de cinco elementos: falta de inclusión, falta de respeto, comportamiento despiadado, gestión abusiva y comportamiento poco ético. Cada barra del gráfico representa la frecuencia con la que las mujeres mencionan cada tema en comparación con los hombres. La “falta de equidad de género” y los “líderes irrespetuosos” muestran las mayores brechas de género, pero las mujeres experimentan todos los elementos de la cultura tóxica excepto dos con más frecuencia que los hombres.
Las mujeres también hablan más negativamente sobre la exclusión que puede o no estar vinculada a la identidad de un individuo, incluidos los líderes que son injustos o favoritos, o un entorno laboral de amiguismo o injusticia. Las mujeres de nuestra muestra usaron más de 14 000 palabras, términos y frases distintas para describir elementos de una cultura tóxica. Los dos más mencionados fueron el favoritismo y la camarilla.
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