Los Conflictos en estado de latencia en las Organizaciones son los caldos de cultivos ideales para socavar el clima laboral, ya que si bien éstos se encuentran silenciados, existen y deben ser gestionados.
Las Empresas destinan mucho de sus recursos de tiempo y dinero en la capacitación del Capital Humano para que sean cada vez más eficientes y respondan a las necesidades de sus organizaciones. Es por ello que, en tiempos de modernidad líquida según Bauman, es imprescindible que Gestores y Administradores de las Organizaciones asuman la responsabilidad de velar por el cuidado de los vínculos intra organizacionales.
Para ello deben estar capacitados o contar con un asesoramiento continuo y constante de Operadores de Conflictos - que son profesionales especializados en la Prevención, Resolución, Transformación de Conflictos y en la Gestión de las Emociones - que les permitan aplicar las estrategias adecuadas para que los conflictos puedan emerger del estado en el que se encuentran de manera segura y controlada, beneficiando principalmente al Capital Social de las Organizaciones.
Es tiempo de construir y liderar nuevas organizaciones, dónde lo urgente del día a día, no esté por encima de lo importante, que es, entre otras cosas, la construcción de redes de contención dentro de la Organización. Ambas actividades deben ser llevadas en paralelo y con el mismo nivel de compromiso, de lo contrario seguiremos aportando a Organizaciones deshumanizadas cuyo único y principal objetivo es la obtención de ganancias sin contemplar los costos económicos, emocionales y sociales que ello conlleva.
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